Fin de semana consecutivo de triatlón, esto desde mis
inicios que no pasaba, pero a Sestao hay que ir, el ambiente que se respira y
el cariño que le ponen es especial por lo que se intenta no faltar.
Las preparaciones habituales las realizo el día anterior
para que no me pille el toro, el picnic post carrera también lo prepara la chef
como de costumbre y solo queda coger los bártulos el domingo y salir hacia el
norte. Otra de las tantas cosas buenas que tiene, es la habilitación de un
lugar para poder aparcar, eso hace mucho en una carrera, porque hay sitios
donde es complicado estacionar y empiezan a entrar los nervios.
Llegamos con el día nublado pero buena temperatura, luego
parece que levantará, así que no hay problemas meteorológicos. Bajo todo lo
necesario y me dirijo a por el dorsal, el venir acompañado da un poco más de
tranquilidad, porque puedes delegar ciertas cosas a los demás. Puestas todas
las pegatinas a todo, me dirijo a boxes y voy colocando todo de la mejor manera
que puedo. Me quedo con la ubicación, fácil de recordar y solo queda esperar
para ir a probar el agua.
 |
| Foto Rakel |
La verdad que, a pesar de ir con bastante tiempo, se me
empiezan a echar los minutos y poco margen voy a tener para probar el agua,
pero después de ponerme el neopreno y dejar la mochila puedo dar unas cuantas
brazadas, las suficientes para que el cuerpo entre en ambiente. Me subo a la
rampa de salida y me coloco en mi sitio. Cada año me empiezo a ir más atrás, no
seré yo quien entorpezca a los que realmente saben de esto. Nos vamos echando
para atrás muy poco a poco “obedeciendo” a los jueces, pero al final cuando
llega el último minuto nos dejan ir hacia delante y acaba la gente incluso más
dentro que antes.
Yo decido colocarme a la derecha y saltar desde ahí al agua,
nunca me ha gustado el jaleo y en este tipo de salidas menos. Jon da la cuenta
atrás por megafonía y allí que empieza la aventura con el bocinazo. Primeros
compases con sensación de estar en medio de todos, golpe en las gafas, que me
las ajusta un poco más y metros de pelea sin saber en qué dirección voy. Cada
vez me voy escorando más a la derecha, pero reduzco el agobio
considerablemente. Esta vez los brazos me están respondiendo y a pesar del ligero
dolor me encuentro con fuerzas, así que habrá que aprovechar. Primera boya sin
demasiadas complicaciones y a por la siguiente.
 |
Foto Rakel
|
Al ir a atacar la segunda, voy tan pegado a ella, que me
topo con el cabo que la amarra y tengo que pasarlo por encima, por suerte no
recibo ningún golpe y ya nos vamos dirección salida. El sonido de los altavoces
cada vez se escucha más alto, eso es buena señal y cuando me estoy acercando
voy con cuidado de no darme ningún golpe con la piedra. Me impulso hacia arriba,
empiezo a correr y me subo las gafas. A pesar de no ser mi sector, por lo menos
no lo he pasado muy mal, así que vamos a ver el siguiente.
 |
Foto Rakel
|
Llego a la bici con buena respiración y sin notar fatiga, me
voy bajando el neopreno, pero a esto que voy a pisarlo para sacar una pierna me
resbalo como si estuviese en la pista de hielo y doy con mi culo en el suelo.
Aprovechando que ya no voy a ir más abajo, me despojo de él sentado, meto todo
en la caja y arranco con la bici.
Transición larga de narices y el ir descalzo por el asfalto
tampoco ayuda mucho. Nada más pasar la línea de montaje me subo a la bici y
encaro la cuestita maravillosa jeje.
 |
Foto Rakel
|
Empiezo a notar un dolor en el culo, no sé
si será de la caída e intento dar caza a un par de corredores que hay delante
antes de que se acabe el repecho. Giramos hacia abajo en la rotonda, pero el
dolor ya empieza a ser preocupante, porque no es que no pueda hacer fuerza
pedaleando, sino que al doblar la pierna derecha tengo unos dolores horribles.
No entiendo como esa caída tonta me puede haber hecho esto, pero es que no
puedo dar pedales. A duras penas me estoy manteniendo con los otros 2 pero lo
único que puedo hacer es dar pedales levantado, aunque también me duele
horrores. Me doy algún masaje, intento estirar de alguna manera, pero nada. Es
una impotencia terrible y no se ni que hacer.
Para empezar, me dejo caer, con dolor, mucho dolor intento
avanzar, me pasa algún grupo no puedo ni intentar seguirles, que rabia me está
dando, pero está eso o abandonar. Llega la cuesta y “por lo menos” me vale para
ponerme de pie y subirla de aquella manera. La bajada más de lo mismo, cada vez
que intento dar pedales el dolor en el glúteo me mata. Me va pasando más gente
y “consigo “engancharme a un pequeño grupo. Hay disputas por los relevos, como
siempre, pero yo demasiado tengo con lo mío e intento no quedarme atrás.
 |
Foto Rakel
|
Subimos para llegar a la primera vuelta, casi con lágrimas
de dolor doy la rotonda, mientras avisamos a un corredor que iba ya directo a
boxes y volvemos a la carga. Empiezo a notar que puedo hacer algo de fuerza, no
sé si se habrá calentado algo, pero ahora por lo menos puedo pedalear, con
dolor, pero puedo pedalear. Llegamos de nuevo a la cuesta, uno de los
componentes que va sobrado se escapa, por detrás nos quedamos 3 y también se
quedan otros 2. Con lo poco que tengo llego arriba con ellos y después de la
bajada comenzamos relevar. Puedo entrar de aquella manera, pero por lo menos
ayudo un poco.
Por delante, lo único bueno es que no se nos han distanciado
en exceso y todavía albergo una mínima esperanza de poder darles caza en el
último sector. Esta vez sí, después de la rotonda cogemos camino descendente,
me voy sacando los pies de las zapatillas, por suerte nos bajamos los tres sin
ningún problema. Dejo la bici, me coloco las zapatillas y a rezar.
 |
Foto Rakel
|
Primeras
zancadas, giro de 180º para salir de boxes y analizo la situación, el dolor por
lo menos no me está impidiendo correr y de caja estoy increíblemente bien, por
lo que solo queda una cosa, morir en estos 5kms.
Primeros metros y ya veo a gente a la que rebasar, tras
varios adelantamientos individuales me topo con un buen grupo al que tengo que
pasar por el otro carril por el poco espacio que hay. Parece que los macarrones
de la madre y la dieta de Diana siguen dando sus frutos y me noto como un tiro.
Giro para volver hacia los boxes y afrontar la cuesta, aquellos años donde este
triatlón era olímpico tener que subir dos veces se hacia mentalmente duro
(aunque siempre olímpico 😉), ahora solo subiendo en una ocasión hay que
intentar ir a lo máximo.
 |
Foto Rakel
|
Primeros compases de desnivel, voy a todo lo que puedo y me
siento rápido, me mentalizo en finalizar la subida a tope sin aflojar y
descansar en la parte llana. El giro, que esta vez esta mas cerca me lleva a la
bajada. Si antes he subido como alma que lleva el diablo, lo mismo hago con la
bajada. Los objetivos para adelantar cada vez son menores, pero intentaré
llegar a los máximos posibles.
A penas restan 2 kilómetros, la animación de Cesar en estos
eventos es la leche y se pone la piel de gallina en cada paso. Llegando al último
me doy por satisfecho con el sector y poco a poco llego a la alfombra que da
acceso a la meta.
 |
Foto Rakel
|
Llegada en 9ª posición con un tiempo de 1:07:40 con un buen
sabor de boca a pesar del gran problema de la bici, podría haber rascado algún
puesto de ir bien la cosa, pero pocos más, por lo que me doy por satisfecho. Después
de recuperar el aliento, saludo a Gorka, unos de los artífices del evento, a
pesar de que soy uno del montón, me llegan al alma sus palabras hacia mi
persona, esta gente del Sestao es impresionante.

Después lo de siempre, saludo al campeón “de la competición”
y a otro campeón, esta vez cadete del vibike, este Markel es mas majo que las
pesetas. Me avituallo como es debido y voy a saludar a la familia, que espero
que se lo haya pasado bien, no me cabe la menor duda. Ducha rápida y espera la
entrega de premios, para pasar a lo mejor del día.
 |
| Foto Rakel |
Del coche recogemos el
picnic y como ya es costumbre aquí, sacamos las tortillas el embutido y demás
menesteres que ha preparado la matriarca, que haríamos sin ella. Faltan
personas festejando estos eventos, unos por compromisos y otros porque la vida
es así, pero a pesar de no estar presentes siempre están.
 |
| Dibujo Olatz |