Llega el turno de una de las carreras en las que mas veces
he participado, esta va a ser la 11ª ocasión que recorro las calles de Orduña y
como siempre, espero que la fiesta se mantenga como en ocasiones anteriores.
Salimos el domingo por la mañanita, de los 7 integrantes de
los vehículos, 5 vamos a correr y los otros 2 harán la labor de salvaguarda,
fotografía y avituallamiento post carrera, así da gusto ir a correr. Llegamos
con tiempo, aparcamos donde siempre y nos dirigimos a por los dorsales, desde
mini txikis, pasando por la de 6km y llegando a la de 10km, hay dorsales para
todo el mundo. Allí también están los familiares y niños del colegio, mas que
una carrera únicamente, es un evento familiar deportivo, es lo que me encanta y
encima a pesar de congregar tanto ambiente han sabido respetar los precios para
no lucrarse, no como en otras.
Bueno al lio, después de charlar con la gente, a falta de
media hora, cada uno va a lo suyo, unos a tomar café, otros de cuidadores y
otros a cambiarnos para empezar a calentar. La suerte de tener el coche al lado
es que no es necesaria la consigna y todo el ajetreo es más llevadero.
 |
Foto Rakel |
20 minutos para el comienzo, temperatura perfecta para
trotar y espabilar al cuerpo, los dolores habituales se van calmando y después
de un par de apretones me voy dirigiendo al arco de salida, por suerte no hay
que ir con mucha antelación para colocarse en buen sitio, como en otras
“macro-carreras” (que casi estás más tiempo de espera que de carrera). Allí me
encuentro con Urko, Aitor, Josu, Ramon…todos listos y dispuestos para sufrir.
Después de un amago de salida, no sé qué le paso a la
bocina, en el segundo intento y pensando que también era “otra broma” nos
quedamos sin saber si salir o no, pero ante la indicación de adelante, le
obedecemos y comienza el espectáculo. Primeros compases con “calma relativa” y
un corredor toma la delantera para tener su minuto de gloria dando la primera
vuelta a la plaza. Nos aprovechamos de que Urko no ha puesto tierra de por
medio para mantener el grupo el primer kilómetro.
 |
Foto Rakel
|
Nos vamos estirando, ahora si que Herrán comienza a imponer
su supremacía y se lleva consigo a Aitor, yo aprovechando la inercia me pego un
poco a ellos, pero aguanto menos de 1000 metros, pero ese arreón hace que me
separe de los de detrás, vamos eso intuyo porque no miro hacia atrás, pero por
lo que oigo no están pegados. No había previsto esta situación y no voy a bajar
el ritmo, así que no me queda otra que mantener y rezar para que no me de la
bajona.
 |
Foto Rakel
|
La recta del kilometro 3 al 4 se me esta haciendo muy
pesada, la soledad de estar solo y saber que hay que seguir apretando me mina
un poco la cabeza. Por delante por lo menos tengo referencia visual (muy
lejana) y estoy deseando retornar de nuevo al pueblo. Mitad de carrera y
afronto la subida hacia la plaza, los ánimos de la gente se vuelven a favor y
el callejeo se me hace mas ameno dentro del sufrimiento que estoy llevando.
 |
Foto Rakel
|
Salimos de nuevo hacia la parte más solitaria y aprovecho la bajada para
recuperar el aliento, el calor se esta empezando a notar, pero gracias a los
avituallamientos puedo refrescarme y bajar temperatura.
 |
Foto Rakel
|
Llegamos al punto del kilometro 8 donde siempre realizo la
mirada pertinente hacia atrás, hasta ahora solo eran intuiciones según lo que oía,
pero ahora toca poner en contexto la situación en la que me encuentro. El giro
de 90 grados me da una visión muy amplia y no llego a ver a nadie por detrás,
por lo que parece que el tercer puesto puede estar a mi alcance. De aquí hasta
el kilómetro 9 intento seguir fuerte en una de las últimas subidas que hay por
el polígono, sabiendo que lo que me resta es para disfrutar. Llego arriba con
fuerzas y me dejo caer por el terreno roto de la pista, esquivo algún que otro
charco, reduzco un poco el ritmo y recupero la respiración.
La ligera subida asfaltada nos adentra de nuevo a la
carretera del pueblo, giro de derechas y calle abajo, giro de izquierdas y
nueva miradita hacia atrás, todo en orden y tranquilo. Y por fin la última de
las curvas girando para poder ver a lo lejos el arco de meta, casi no me creo
que este año también pueda estar en el podio, por lo que disfruto como nunca de
la larga recta que me lleva a línea de meta chocando a los niños que allí se
aglomeran.
 |
Foto Rakel
|
Entrada en meta en tercera posición con 32:48 y con una
alegría inmensa por lo inesperado del resultado. Allí saludo al ganador Urko,
que esta vez ha sufrido un poquito mas de lo habitual para alzarse con la
victoria. Después entra Gontzal (que si hubiese querido otro gallo hubiese
cantado) y más tarde al gran Apraiz, que seremos más viejitos, pero aquí
estamos dando caña.
 |
Foto Rakel
|
Mientras charlo con el señor (y nunca mejor dicho 😉)
Txakartegi entra en meta Diana en primera posición, quitándome de nuevo el protagonismo
de la carrera jajaja. También entran en meta mi sobrina y su acompañante, por
lo que de momento todos hemos finalizado.
Ahora toca buscar al pequeño de la casa que ya anda por ahí
con los de su clase expectantes para su salida. Es una pasada ver la ilusión
con lo que los “paralímpicos” recorren su distancia, los txikis se exprimen al
máximo y los mini-txikis se lo pasan sin importar tiempo ni marca, solo
pasárselo bien haciendo deporte.
 |
Foto Rakel |
Una cosa que han cambiado hace unos años, que aunque me
repercuta, me parece lo mejor que se ha hecho, es el sorteo de bonos, porque si
sólo se reparten, como antiguamente a los primeros, siempre van a ser más o
menos los mismos los que los reciban y de esta forma todos entramos en el bombo,
me sigo quitando el sombrero por la organización de Arando Korrikalari Taldea. Después
de todo, la entrega de premios, café para casa y filipinos, pero como tengo un
par de cajas, una de ellas la reparto entre los chavales que han corrido del
cole, eso si, en cuanto abro la caja, como el anuncio, “me salen amigos por
todas partes” jajaja.
Y ahora sí, para dar el colofón al día deportivo y después
de la ducha de rigor, nos dirigimos al área de picnic para degustar las
delicias culinarias de mi señora madre y pasamos un buen rato entre risas, así
da gusto hacer carreras….
No hay comentarios:
Publicar un comentario