lunes, 7 de marzo de 2022

XXIX Duatlon Sprint Eibar-ko Duatloia 2022

 De nuevo vuelta al ruedo, hoy antes de salir me acuerdo porque no solía hacer casi duatlones, la meteorología me echaba para atrás siempre y hacia uno o dos más adelante. Hace un par de días que ha cambiado el tiempo con un descenso de temperatura y lluvia y con ese miedo nos dirigimos hacia Eibar para el segundo duatlón del año.

Un par de vueltas al llegar para encontrar sitio de aparcamiento y recogemos los cambalaches para ir a por el dorsal, 6 ºC y parece que podemos librar del agua, esperemos que así sea, aunque todavía no tengo claro cómo voy a salir a correr. Ponemos las pegatinas a los vehículos, me aparto un poco de la crack de la familia para no interrumpir jajaja y nos dirigimos al box.

Foto Kiko

Tomo nota del sitio como de costumbre y dejo las cosas con bastante rapidez, tampoco hay que hacer tanto preparativo como en los tris. Le acompaño a Diana a por su café de rigor y a falta de 20 minutos me pongo a calentar. Carrera para arriba carrera para abajo me doy cuenta de lo durillo que se va a hacer el circuito de carrera con constantes subidas y bajadas sin poder encontrar ritmo.

Faltan 5 minutos para la salida de las chicas y voy a ver si dejo la sudadera a los acompañantes, pero no les encuentro por ningún lado, el carro naranja no se ve por ningún lado, salen las chicas y desisto de mi intento, no sé si dejarla por aquí o llevarla de la mano hasta encontrarles y es esta opción la que decido hacer. Así que allí estoy yo en la línea de salida con la ropa en la mano (una cosa nueva, esta nunca me había pasado, jeje)

Bocinazo de salida y salimos cuesta abajo sin control. Se forma un grupeto delante al que no puedo seguir y me quedo retrasado en la primera ascensión. Giro de 180 y vuelta a la pendiente con el aliento entrecortado. En la cima intento recuperar el aire y consigo llevar al momento de dejar sudadera que no me está dejando correr a gusto, lanzamiento perfecto y me centro en la carrera. 

Foto Kiko

Se han escapado Joanes y Urko (como era de esperar) y por el camino se han quedado algunos, después de rebasar a Saitua, los más cercanos que tengo son Koldo y Gontzal, manteniendo la distancia y estando a mitad de del primer sector decido no desgastar demasiado en este primer lance porque en bici, con suerte, nos vamos a juntar.

Consigo enlazar con el dúo, estoy un rato con ellos y en la subida decido dar un relevo a Koldo que ha llevado gran parte del esfuerzo. Ultima vuelta de las 4 que había que dar y llegamos a la transición, fuera zapatillas casco y al lio. Consigo hacer una buena transición y enlazo con Eguiguren y Kanaache y sin que se me vayan en el primer arreón “espero” a que nos pillen por detrás el dúo que habíamos entrado a boxes.

Foto Kiko

Comienza la aventura en lo que peor se me da, el perfil va a ser rompe-piernas y solo me centro en intentar aguantar lo máximo posible. Creo que a estas alturas nunca conseguiré mejorar en bici y me da una impotencia de la leche ver cómo van los demás con una fluidez espectacular, pero es lo que hay. Comienzan los sube-bajas (mas sube que bajas) a la vez que empiezan los ataques, a mi parecer a veces sin sentido, en los que hay que estar atento para no perder el tren. Sobre el Km 5 que hay que dar un giro, veo a los lideres y luego estamos nosotros, se juega la tercera plaza en este grupo, pensaba que había alguno más por medio.

Es increíble lo que estoy sufriendo para poder seguir incluso en las bajadas, no puedo ni beber liquido por temor a perder comba y el corazón esta a mil. Llegando al kilómetro 10 la cuesta interminable me pone a prueba, apretando todo lo que puedo y no llegamos arriba nunca y cuando parece que ya se me acaban las fuerzas empiezo a ver el final, con lo que empujo un poco mas y consigo aguantar el envite. Bajada peligrosa con la carretera mojada, no consigo meter aire al cuerpo y me cuesta dar pedales, por suerte el rebufo del descenso me ayuda a seguir en el grupo.

De repente llegamos a una rotonda en la bajada, por delante veo que se caen Iban y Koldo, lo primero que pienso es que hay algo de aceite y pienso que nos vamos a caer todos, por suerte los esquivo como puedo yéndome hacia el exterior y consigo salir de la situación sin lamentar nada. Nuevamente toca subida y enlazar con el corte que se había generado, solo estoy deseando que acabe el sector y poder correr. Ya no se ni cuantas subidas he tenido que apretar el culo, pero en esta que llega ahora las piernas dicen que hasta aquí. Veo como se van distanciando los compañeros del grupo y me quedo con el mal sabor de boca de no haber sido capaz de aguantar hasta carrera y probar suerte, pero bueno es lo que hay.

Sin tiempo de lamentaciones intento retrasar lo máximo posible la captura por el grupo de detrás, aunque si que es cierto que me lo tomo con un poco mas de calma. El grupo liderado por Omar viene rapidísimo y consigo colarme en él a pesar del dolor de piernas. Un par de acelerones mas y veo que llegamos al pueblo, por lo menos he podido mantenerme con el grupo. No sé exactamente donde es el desmontaje, las curvas y los adoquines hacen peligrosa la llegada, menos mal que vamos un poco distanciados.

Foto JuanMutil

Veo a lo lejos a una persona con banderín, me voy preparando para bajar, pero al llegar solo indica que hay una curva, por lo que sigo pedaleando hasta que después de una curva llega la línea sin casi tiempo de preparar la bajada. Bajo como puedo y sigo corriendo con la inercia, estoy bastante tocado físicamente y veo emborronados los números para dejar la bici. Llego a mi sitio con mas pena que gloria y me calzo las zapatillas. No tengo las mejores sensaciones, pero intento apretar todo lo que puedo, alcanzo a un corredor y me vengo arriba, por detrás he cogido algo de ventaja a los compañeros del grupo de bici y solo miro hacia delante.

A estas velocidades cualquier mínima distancia es muy difícil de recuperar y cada metro que robo al de delante es una victoria. Primera vuelta y por lo menos he cogido algo de ritmo, aunque jadeo como un perrete, los ánimos de la gente del pueblo hacen que te crezcas un poco y tengo a la vista a otro corredor. Primera pequeña subida y de nuevo la lacra de esto, parece mentira que con “lo conocido” que es, no tenga ningún reparo en recortar por toda la acera, que si me dices que vas en grupo y éste empieza a recortar (aunque no es justificable) pues bueno, no vas a ser el único tonto, pero yendo solo…(ya me lo habían comentado en alguna otra carrera, pero esta vez ya lo he visto con mis propios ojos) en fin…profesionales de pegatina. En la ligera bajada me acerco a él y en la ultima pendiente consigo darle caza a Kaanache.

Aprieto un poco para llegar a la parte superior y me dejo caer sabiendo que ya está el pescado vendido. Por delante no tengo objetivo y por detrás, tonto de mi por no mirar, creía que tampoco, pero a falta de 200m llega Koldo con otros 2 duatletas. No se si por la inercia o yo que se, cuando veo que me rebasan empiezo a apretar para intentar no ser adelantado por todos, mi tardía reacción solo me deja adelantar a uno de ellos y entramos del 6 al 9 en el mismo tiempo, que tampoco nos iba a llevar a ningún, pero para que veas como es la cabeza.

Foto Ion Zugasti

De esta manera acabo 8º con un tiempo de 52:10 en esta carrera que me ha puesto la patata a tope. No consigo coger aire y me tiro al suelo con la esperanza de aliviar un poco la presión, que cansado a la vez de a gusto que se está aquí tirado. Cuando puedo incorporarme voy a preguntar a Gontzal su puesto, porque me encantaría que hubiese conseguido podio, pero me dice que no, que no ha podido, pero bueno ahí esta el tío siempre en la salsa, un crack. Hablo con López (viejo conocido desde Ondarroa) y me dice que he sido primero en mi categoría, porque como yo tampoco controlo mucho eso…pero un reconocimiento secundario al esfuerzo que no está de más.

Foto Kiko

Entre unas cosas y otras veo llegar a Helene a la que felicito y un poco mas tarde a la buena de la familia, que a la chita callando se esta haciendo un hueco entre las buenas del mundillo popular, sacrificio de 100, todos mis respetos. Pero lo que mas me ha gustado es llegar a meta y ver llegar al pequeño Aihotzin venir hacia mí y abrazarme, estás cosas pagan todas las que me lía jajaja.



martes, 15 de febrero de 2022

IV Duatlon Sprint Erandio 2022

 Después de hacer alguna carrerilla y pasar algún que otro catarro volvemos a la carga con el duatlón de Erandio. Fue la única carrera que hice el año pasado y pudiendo volver este año me animo a participar (no vaya a ser que también sea la única, jajaja). Llegamos al pueblo con tiempo y nos dirigimos a la búsqueda de los dorsales que por suerte nos los han cogido con anterioridad.

Mucho tiempo por delante, aunque viendo que el panorama decido meter la bici en boxes y esperar con la familia fuera. Empiezo a ver y charlar con los viejos camaradas que a base de pasar año tras año en estas historias nos hemos ido conociendo. Diana preparando sus menesteres por ahí, Aihotzin con los abuelos, así que solo queda que se vaya acercando la hora para ponerse de corto.

Media hora para el comienzo de las chicas y estoy pegando los primeros trotes, con lo que he sido yo de llegar media hora antes y hacer todo a la carrera jijiji. La patrulla del Alusigma se deja ver por los alrededores, lástima que no haya mas equipos de ese estilo para crear un poco de competencia (el poder del dinero y buena gestión). Me acerco a ver la salida de las chicas y de paso a ver si me entero cuando salimos nosotros. Después de que salgan me entero por Iker que todavía nos quedan 15 minutos así que nada a seguir haciendo que hago algo por los alrededores.

Veo la primera vuelta de las chicas, Diana saca un trozo, pero habrá que ver como se organizan las perseguidoras en el segundo sector. Yo me voy acercando a la salida, esta casi todo el mundo ya allí, pero consigo encontrar un hueco un poco delante. Veo al juez con la bocina preparada y cuando pega el bocinazo sale la marabunta atopisimo. Yo por el lateral izquierdo me como un par de ramas de las jardineras, pero por suerte sin consecuencias graves. Llegamos a la primera curva y el peligro se ve venir, libro de milagro. Un poco mas adelante en un estrechamiento veo tropezar a gente por delante yéndose Rendo al suelo, por suerte le podemos esquivar y mas adelante le veo remontar por lo que me alegro de que no le haya pasado nada.

Foto Yolandesope

A pesar de ir a toda santa leche (el primer km marca por debajo de 3) veo a lo lejos a Iker que se aleja dejando un hueco entre él y los Alusigma, creo que apuesta por una mala estrategia, pero cada uno ve la carrera desde su posición. Llegamos a la primera ascensión, a la cuestarraca del pueblo con ganas de ponerme a andar, pero por vergüenza subo al trote jajaja.

Etxebe coge una ligera ventaja y no tiene visos de aminorar, con lo que toca analizar la carrera. Por delante va a ser difícil coger a gente y los de detrás seguramente nos pillen en bici, así que intento recuperar el aliento y tomarme las cosas con mas calma. Nos vamos turnando Gontzal y yo en este primer sector y después del segundo ascenso de la cuesta nos tomamos el regreso a boxes pensando en la primera transición.


Foto @eduborrowsport

Los ánimos del speaker nos llevan cuesta arriba a coger las bicis, buena transición a pesar de estar mucho tiempo en blanco y arranco hacia la salida viendo como cae Etxebe al cruzar la línea de montaje. De nuevo por suerte lo podemos esquivar por los pelos, pero se le trunca la gran carrera que estaba haciendo. La bicicleta va a ser muy rápida, he salido de los primeros del grupo y me tomo mi tiempo para ponerme bien las zapatillas. Empieza a llegar la gente y viendo que tenemos a 3 corredores no muy lejos habrá que intentar pillarles. Empezamos a dar relevos, pero la organización brilla por su ausencia, del grupeto que estamos solo 5 estamos entrando a los relevos y a pesar de intentarlo varias veces no hay nada que hacer. 

Foto @juanmutil

Terminamos la primera vuelta, como era de esperar nos cogen varios corredores por detrás y viendo que no hemos alcanzado a nadie la estrategia varia. En esta segunda vuelta y después de la rotonda en subida me quedo un poco descolgado, me cuesta un apretón coger el grupo de nuevo y viendo la peligrosidad de la carretera habrá que rodar con mil ojos. En la segunda vuelta hay algún que otro acelerón pero que es neutralizado rápidamente. Los pasos por el callejeo del pueblo comienzan a ser peligrosos y en una curva de estas un corredor intenta pasar por el exterior, yo al ver una rueda de repente me intento meter porque veo que se puede ir contra los coches aparcados, después del susto le digo a Gari que vamos a ir tranquilos para llegar a correr, que no es necesario jugársela de esa manera. Ultima vuelta y empieza el baile para estar bien colocado en la transición. Este año se entra por un lugar diferente y después de esperar nos arremolinamos cerca de la línea para bajar. De nuevo lio para desmontar y por suerte subimos en orden para dejar la bici.

Foto Yolandesope

De nuevo buena transición a pesar de tener una bici ocupando parte de mi barra y de nuevo todos al galope. Salgo el tercero o cuarto del grupo que hemos entrado y ahora toca echar lo que quede en estos casi 3 kilómetros que quedan. Al llegar a la cuestarraca Gontzal y Aimar cogen la delantera, las piernas me están chirriando y solo puedo ver como se alejan sin poder reaccionar.

A partir de aquí recupero el aire en el llano, pero que se me empieza a gastar para intentar que no me alcancen por detrás. Oigo la respiración del perseguidor, pero no sé a qué distancia está, estoy corriendo a todo lo que tengo, ultimo kilometro de carrera y primer vistazo, no esta cerca pero no me puedo dormir en los laureles, aunque gracias al viento a favor parece que podre aguantar. Ultima curva y ya veo la línea de meta a lo lejos, empiezo a reducir un poco la velocidad para entrar con dignidad y cruzo el arco.

14º puesto con un tiempo de 55:36 para esta locura de carrera en la que hemos llegado sanos y salvos, que al final es lo que importa. Felicito al gran Joanes que ha ganado como un jabato y charlo de la aventura con Gontzal que nunca falla. En el suelo esta Diana recuperando, le pregunto la posición me dice que primera, la madre que la pario. Charlo con el emocionado Kiko y con los integrantes del Dida y como se por donde esta el polideportivo me aventuro a por una ducha más que merecida.


Cuando llego están a punto de dar los trofeos, llaman a los premiados y algunos todavía están con el control antidoping y de repente oigo mi nombre en la categoría. Me pilla por sorpresa porque ni siquiera se contra quien compito en esta categoría (cosa que luego vi que entramos los cinco primeros de dicha categoría a escasos segundos) así que bueno, un reconocimiento para los abuelillos, que bien, pero que debería ser eso, un reconocimiento (a buen entendedor…)

martes, 25 de enero de 2022

Laudioko XIV. Herri Krosa Llodio 2022

 Empezamos el año yendo a un evento al que todavía no había ido nunca. Gracias a la inercia que cojo porque Diana se apunta a las carreras, me inscribo yo también a las 5 millas de Llodio.

“Aprovecho” que salgo de Espejo de trabajar la mañana del domingo para ir directo, los -6ºC y la niebla no es que sean muy llevaderos, pero por el camino parece que va saliendo el sol y aunque la mañana seguirá gélida los rayos acompañaran.

Llego con tiempo y ya me han recogido el dorsal por lo que toca aguantar lo máximo posible para ponerse de corto. Los Didas ya están revoloteando por ahí, incluso algunos de esos locos ya llevan una hora corriendo (están como una regadera, jajaja).             20 minutos y como este año tampoco ningún club me ha hecho oferta alguna (jajaja) pues me coloco mi camiseta blanca de toda la vida, dejo la mochila en la consigna y salgo a entrar en calor con Enaitz, que en las zonas de calor se consigue, pero en la sombra… osti tú!

La gente se va acercando al arco, saludito al gran Apraiz y hago lo propio, esquina derecha donde encuentro un sitio y a esperar. Speaker con la cuenta regresiva y allí salgo intentando colocarme en un buen lugar. 

Foto aiaraldea.eus

Como ya es habitual empiezan las hostilidades desde el primer metro y con suerte me puedo mantener con el grupillo que se ha formado. Pasándolas canutas el reloj marca el primer Km rozando los 3 minutos, menuda salvajada. Veo como los Koldos, Unai y Marcos dirigen al resto de los participantes, Enaitz delante mío va como si no le costase y yo me estoy muriendo, que sensación de agonía.

En el segundo kilometro empiezan a tirar los 4 de delante, las piernas no pueden ir más rápido y a pesar de estar estabilizada la respiración, se abre un hueco entre estos y nosotros. Tres, cuatro, cinco metros, veo como se van alejando y decido intentar cambiar el ritmo para poder alcanzarlos, no se como me va a salir la apuesta, pero hay que jugar las pocas bazas que tengo. Con mucho esfuerzo y gran gasto de energía consigo llegar hasta ellos e intento recuperar el aliento, menudo calentón más gratuito.


Foto Dani Ibarrola

Es muy bonito estar al lado de esta gente para poder ver como gestionan la carrera (también es cierto el 70% de ellos es mi 100%, así cualquiera, jejeje) yo por mi parte solo puedo intentar adaptarme a dicha gestión y gracias. En el Km 3 se baja un poco el ritmo y en el 4 Ayesta decide hacer un cambio de ritmo. Le siguen Unai y Koldo, a mi me cuesta un poco, pero puedo mantenerme con ellos y Marcos se distancia un poco, pero gracias al nuevo “parón” y la llegada a una zona en la que se empieza a empinar un pelín consigue pillar el grupo de nuevo.

Comienza la tan temida zona de subida, primero con un poco de asfalto, pero después con las rampas de barro y hierba helada. En la primera curva, sin comerlo ni beberlo, me veo en la primera posición y viendo como esta el terreno, mantengo para evitar posibles caídas entre la zona de “trail” que nos han metido. Nos van avisando del peligro constantemente, primero Ibarrola que iba en bici en la zona asfaltada y ahora la gente que esta por la zona agreste. Después de pasar un puente de madera con mucha precaución por parte de todos comienzo a ver el final de la ascensión.

A partir de aquí toca una bajada vertiginosa en la que mis piernas no dan para mas y comienzan a rebasarme los demás integrantes del grupo. Consigo llegar mas o menos con ellos a la zona llana de abajo, en estos momentos soy el ultimo de los 4 corredores que nos hemos quedado y de nuevo realizan otro cambio para estos 2 últimos Kms que quedan. Mi cuerpo dice hasta aquí, demasiado a durado la aventura de estar con los buenos y me voy quedando rezagado viendo como se me alejan sin que pueda hacer nada al respecto.

Foto aiaraldea.eus

Ya solo me queda mantener la cuarta posición que no va a ser moco de pavo, porque intuyo que no estará Marcos muy lejos (cosa que no quiero ni mirar). Por la zona delantera veo que el tercero se ha quedado cortado y ya no se si es una ilusión óptica o le estoy recortando algo. A penas queda un kilometro y ese aliciente de verlo algo mas cerca cada vez me da una chispa que si no fuese por eso ni me lo plantearía. Pasan los metros distancia parecida, pero parece menor, se me esta acabando la carrera y no consigo alcanzarle, la gente me anima y aprieto un poco mas si cabe. Le estoy recortando, pero no sé si será suficiente. Que sensación de impotencia el ir lo más rápido que puedes, verle tan cerca y tan lejos a la vez. A falta de 300m consigo llegar a él y sin perder la inercia que llevo continúo tirando. Llego a la ultima curva, pica un poco hacia arriba y después de echar un vistazo doy lo último que tengo para poder entrar en tercera posición totalmente sin aliento. 

Foto aiaraldea.eus

Me siento un rato en el suelo para poder recuperar, madre mía que final, que carrera más bonita. De esta manera consigo llegar con un tiempo de 24:39 en tercer lugar y con calentón de tres pares de narices. Cuando me recupero un poco voy a felicitar a los demás corredores y charlar un poco de la carrera.


 También espero a Diana que acaba de llegar en primera posición para saber un poco de su carrera (aprovecha, que toca apretar el culo en otro ámbito). Pero al final lo que nos queda es lo de siempre, buena mañana para pasarla con la gente de este mundillo, risas, poteo y vuelta a la normalidad, agradeciendo como no podía ser de otra manera, la buena organización desempeñada por el Club Atletismo Laudio para realizar todo esto.
Foto aiaraldea.eus


miércoles, 22 de diciembre de 2021

43 Media Maratón Vitoria 2021

 Y continuando con este mes loco de carreras (parece que lo que no he corrido durante el año lo quiero recuperar al final) llega la media maratón de la ciudad, distancia que corro por ser de aquí pero que no me llama mucho, demasiado tiempo sufriendo jajaja.

Los días previos no pintaban nada bien, niebla y frio constante durante casi todo el día no auguraba nada bueno. El día anterior dando un paseo recogemos los dorsales con la niebla como acompañante, no tenia visos de poder cambiar la situación de tal manera. Dia de la carrera, casi todo preparado y al mirar por la ventana no hay rastro de nubosidad, frio sí que hace, pero es más llevadero y ni gota de viento, la verdad que es de los mejores panoramas que he tenido para esta carrera.

Después de dejar al pequeño demonio donde la abuela (iba a hacer demasiado frio para el retaco) cogemos dirección Mendi antes de que nos corten la calle, para poder aparcar cerca y adquirir una preciada taquilla.

El ambiente previo por las inmediaciones es espectacular y hace que aumenten las pocas ganas de correr que tengo. Después de saludar a los conocidos que me voy encontrando, a falta de 30 minutos me voy a cambiar y como cada año veo la misma escena, todo el mundo cambiándose fuera, en las taquillas y dentro, en los vestuarios, estamos los 4 de siempre con todo el hueco para nosotros, bueno que sigan así, que yo prefiero banquito.

Dejo la mochila y a pesar de que queda mucho, doy mis primeras carreras para no quedarme frio. Como de costumbre a falta de 15 minutos voy a dejar la sudadera a la taquilla y salgo de corto buscando el sitio de salida. Primera línea reservada para los federados, aunque en cuanto nos dejan pasar cada uno busca su hueco. Yo me quedo en segunda línea sabiendo mi ritmo inferior. Me fascina como la gente sabe más o menos el tiempo que va a hacer, me pregunta Asier que ritmo tengo pensado llevar, pero como eso me lo va a determinar la carrera solo le digo que intentare coger un grupo acorde a mis sensaciones, él me dice mas o menos lo que quiere hacer y el cabrón va y lo clava, sorprendente.

Este año se sale un poco más abajo que en otras ocasiones aun así en cuanto se da la salida todos nos ponemos a correr como si no hubiese un mañana por encima de nuestros ritmos. 

Foto Jull Roc

La calle es ancha y se pueden coger fácilmente las posiciones deseadas, por delante los cracks y después veo un grupo con Iñigo, Bravo, Enaitz, Bizkarra…que puede ser interesante. Con la emoción de la salida y viendo que voy bien les paso y voy a por el siguiente grupo en el cual me quedo para encontrar ritmo, alto, pero no voy muy forzado.

Foto Rakel

La primera pasada por la Avenida vamos todos en fila de a uno y en San Martin escucho por primera vez en mi vida alguien sensato que me dice “cuidado que queda mucho”. Por suerte un poco mas adelante se baja una micra el ritmo y vamos algo mas en grupo. En la calle Manuel Iradier voy pelín descolgado y me dice Asier si tengo intención de seguir en el grupo, mi idea es intentar llegar a Los Herrán con ellos pero que si no lo ve claro le indico que me pase.

Foto Rakel

Consigo llegar con el grupo a la calle del descanso (como yo la llamo) la ligera pendiente negativa hace que coger aire sea un poco más fácil pero estos perrillos solo se empeñan en ir cada vez mas rápido. Por Iparralde, en el Km 9, hay un cambio de ritmo (o como me dijo luego “me fui yendo jajaja”) por parte de Gontzal, aquí si que ya no puedo mantener esa velocidad y me conformo con ir perdiéndoles poco a poco. Me sorprende a la vez que me molesta, que este año no haya naranjas en el avituallamiento, contaba con ellas para ese un plus de energía que me daban (no soy amigo de los geles), pero viendo las circunstancias tendré que racionar la mandarina que llevo jijii. Giro y vuelta para el centro de Vitoria donde pillo a Gus que me da ánimos (después me los volverá a dar…)

Segunda mitad de la carrera, hasta aquí ha ido la cosa mas o menos como lo esperado, si bien es cierto que el ritmo ha sido más alto (aunque el reloj contaba lo que quería llegando a marcar más de 500 metros al final de la carrera) las sensaciones, que es por como corro yo están siendo buenas a la espera de ver cuando llega el bajón, que llegar va a llegar. 

Foto Unai

Tengo la suerte de engancharme a Iñigo Alzola que me lleva por la calle Francia a buen ritmo, zona en la que también, el mítico Gontzal, de los buenos corredores que ha tenido la ciudad (y de 10 como persona) nos anima en el tramo difícil de subida. Por la calle Ortiz de Zarate y Florida vuelven los ánimos de la gente y la trotamundos de mi hermana que aparece en todos los lados como por arte de magia con su cámar. Aquí es donde le comento a mi compañero que le voy a dar un relevo a ver si puedo mantener el ritmo, por desgracia debe estar algo tocado y no me puede seguir, así que a partir de aquí toca remar en solitario.

Foto Rakel

Giro de 180º, veo que no tengo muy lejos a perseguidores, pero tampoco diferencio quienes son. Empiezo a tener molestias en el gemelo derecho y viendo lo que queda espero que no incremente. En una de estas me rebasa Bravo y otro corredor, me parece admirable la capacidad de gestionar las carreras que tiene, aunque bien es cierto que es un veterano con muchas carreras y experiencia a las espaldas que, entre otras cosas, mide la alimentación al milímetro. Ni intento seguirles porque me van a fundir y es en el km 16 un poco antes de ver a mi padre de nuevo donde empiezo a tener sensación de entrar en reserva. La larga recta de Manuel Iradier es testigo de ello y la mítica cuesta de San Ignacio da fe del sufrimiento.

Foto Rakel

Por suerte este año vamos directo por las universidades hasta el Prado, aunque hay otra piedrecita en el camino llamado sube-baja que rompe el ritmo adquirido. Evito los adoquines de Fray Francisco y llego al avituallamiento fantasma del km 20 (no se porque se empeñan en seguir poniéndolo ahí, pero será por algo…). En la recta hacia el estadio oigo que me están alcanzando de nuevo y me sorprende ver que me rebasa Gus (es increíble la capacidad de recuperar de esta gente) me anima a engancharme a él, no tengo mas marchas en este motor recalentado, pero como me ha pasado casi arriba de la cuesta dejo todo lo que tengo dentro para poder llegar con él a meta.

Foto Rakel

Entro en la recta de Mendi resoplando como un caballo moribundo y viendo que en el marcador pone 1:11 y algunos segundos, el instinto me hace apretar el culo (aunque sinceramente me da igual eso de las barreras de los minutos). La recta se hace interminable, pero consigo pasar la línea en 1:12:06 en 16ª posición.


Entro al estadio después de felicitar a los compañeros de fatiga y veo que tampoco hay zona de masaje, me imagino que será por las circunstancias, pero vaya, para una vez que llego pronto…jajaja. Luego voy a recta de meta a ver entrar a Diana que lo ha hecho fenomenal y rápidamente a la ducha que el jilguerín se está quedando pajarito.

Hace poco el señor Kiko me dijo que había oído decir a Fiz que la gente popular se obsesiona con los tiempos y en parte le puedo dar la razón, poque hay gente enfermiza, pero analizando un poco veo que a la gente popular no puede luchar por puestos de podio para olvidarse del tiempo. Los populares, los realmente populares como somos la mayoría, solo nos queda superarnos a nosotros mismos y esa es la recompensa que tenemos, pero que si no se consigue (como va a ser la mayoría de las veces) no hay que frustrarse por ello, porque como suelo decir, el lunes vas a tener que ir a trabajar igualmente.

miércoles, 15 de diciembre de 2021

IX Carrera Bomberos de Madrid

 Qué mejor motivo para ir a visitar a la familia que una carrera. Esta vez aprovechamos para salir de los diluvios universales de Vitoria para coger dirección a Madrid y correr la carrera de bomberos que este año se ha desplazado de su fecha habitual. Varias visitas obligadas y se acerca el día del madrugón para coger el metro a horas inusuales para mí e ir al centro de la capital. El frío se mete por los huesos sin pedir permiso y allí estamos en la puerta del sol el señor Kiko, la señorita Diana y el menda esperando para cambiarnos antes de que recojan la consigna. En cuanto nos ponemos de corto (ahí estoy yo con mi camiseta y pantaloneta grande) y dejamos la bolsa nos ponemos a trotar porque la gélida mañana me está entumecimiento demasiado. Calle arriba calle abajo esperando la hora del inicio y a falta de 10 minutos nos vamos acercando a la línea de salida. Minuto de silencio, salida de los bomberos por equipos equipados y voy intentando buscar hueco. Después de la cuenta atrás comienza el espectáculo, primer metro esquivando un corredor caído delante de mí, por suerte no me he caído con él y avanzo hasta tener vía libre.

Foto soycorredor.es

Primera subida con un grupito y cuando giramos a la derecha en bajada, Sergio empieza a estirar el grupo e intento ir con él. Llegamos a la Cibeles y cogemos carretera hacia arriba, el primero comienza a alejarse y no puedo con su ritmo, me quedo rezagado pero mantengo la zancada hasta que me coge el grupito de atrás. Conociendo que nos quedan varios kms de subida decido guardar fuerzas detrás de los primeros corredores. Vamos adelantando a los equipos de bomberos que han salido delante nuestro, los parciales están siendo muy rápidos. Sobre el km 4 parece que nos quedamos 3 del grupo, al primero lo tenemos a unos 20 metros pero la distancia en ningún momento se reduce y empieza el sobreesfuerzo de intentar que no me dejen en la eterna subida. El último km de ascenso lo paso realmente mal, pero no se me pueden escapar como hace 2 años.

Foto soycorredor.es

 Estoy viendo el giro y doy el resto para llegar con ellos, al llegar al cono se van un poco largo y les digo que es aquí donde hay que girar. Comienza el ansiado descenso, cojo un poco de aire e intento incrementar un poco el ritmo. Parece que me estoy distanciando un poco pero solo es una ilusión ya que en el km 7 me alcanza Jhon y mi objetivo principal es pegarme a él. Lo que en principio iba a ser un descenso más cómodo se convierte en la parte más dura de la carrera. Estando en tercera posición y con el cuarto pisandome los talones, se me está haciendo la bajada eterna y se me empiezan a terminar las fuerzas. Los kilómetros se me están haciendo eternos y hay puntos donde comienzo a hacer la goma, en un par de ocasiones parece que se me va a alejar definitivamente, pero consigo mantenerme con mí liebre virtual y me lleva hasta el kilómetro 9. 

Foto soycorredor.es

A falta de poco más de 500 metros se empieza a distanciar el segundo clasificado y doy mi último gramo de fuerza para mantener los pocos segundos de ventaja que tengo con mi perseguidor. Viendo el arco de meta echo la primera mirada hacia atrás y aunque está relativamente cerca creo que no va a poder darme caza. Últimas zancadas y rebaso la línea totalmente destrozado e integrando recuperar el aliento. Al final ha sido un 3er puesto muy sufrido en un tiempo de 32:47 y también consigo el primer en la categoría de bomberil, seguido muy de cerca por los otros dos componentes del podio de esta categoría.

Foto soycorredor.es

Después de coger un poco de aire nos sacan la foto del podio y me dirijo a por el avituallamiento con un dolor de abductores tremendo. Mientras digiero algo, voy en contra de la carrera para ver la llegada de Diana, la cual se lleva la victoria general con una gran actuación.

 Por último toca esperar a Kiko, el tercer integrante del equipo, que baja sus expectativas de tiempo y concluye con muy buenas sensaciones. Después del ajetreado podio subiendo cuatro veces a él, charlo un poco con varios compañeros de oficio y vamos a recorrer la gran capital con parada intermedia para la comilona en el Museo del jamón, habitual en estas ocasiones.

Foto soycorredor.es