Como cada final de año, llega la media maratón de Vitoria.
Buena carrera con la que dar casi por finalizado el año y que hay que hacer por
el buen ambiente que hay al correr por las calles de la cuidad. Este año no iba
a ser tan benévolo conmigo, más de dos meses con dolores aquí y allá y sin
encontrarme a gusto las veces que salía a correr, pero aceptando la situación
había que ir a hacerlo lo mejor posible, me gusta el deporte, no las marcas.
Los días previos sin muchas ganas dan la llegada al domingo
de competición. Como siempre una horita antes por los alrededores para coger
taquilla en mendi, ver el panorama con la calma y saludando a la gente conocida
es primordial en estas ocasiones.
Con los deberes hechos y a falta de 30 minutos para el
comienzo me dirijo a los vestuarios para entrar en faena. Tiempos, ritmos, mmp
y de más conversaciones se oyen por los alrededores y como dice un buen
compañero…y yo sin nutricionista, jajaja. Salgo con el ligero frio vitoriano y
noto que el viento empieza a hacer acto de presencia. Primeros pasitos con el
dolor del tobillo me devuelven a mi realidad, pero con un poco de calor
disminuirá. Después del breve calentamiento, el cual no pasará a los anales de
la historia, me dirijo a dejar la sudadera y a pegar las últimas carreras antes
de acercarme a la línea de salida. Allí están los galgos en primera fila, me
coloco un poco más atrás que de costumbre y espero a que den la salida sin
mucho nerviosismo.
Pistoletazo, primera recta como siempre, intentando buscar
un sitio sin multitudes que encuentro antes de la rotonda.
Foto Rakel |
Veo como se van alejando
grupos que el año pasado decidí coger y me centro en intentar no pasarme
demasiado, es lo que tiene un comienzo cuesta abaja y el con viento a favor.
Primeros metros en los que se va seleccionando al personal y a sabiendas del
viento que hace me tengo que buscar un grupo, algo más rápido de lo que debería
ir pero…
Bonito ambiente por toda la avenida y primer encuentro con
el viento de cara al dar el giro de 180º. Vamos en fila de a uno y cada uno
intenta no separase mucho del que le precede, hago un par de adelantamientos
para no perder el grupo llegando al quinto Km.
Foto Rakel |
La subida antes de llegar a la
rotonda de Mendi me hace apretar un poco más, antes de poder recuperar en la
ligera cuesta hacia abajo. Se empieza a romper el grupo y pego un acelerón para
no perder a todos los componentes, iluso de mí no puedo aguantar ni un Km con
ellos y como sé que poco más voy a poder hacer me quedo con mi ritmo para no
morir antes de lo esperado. Este año comparto parte de la carrera con otro de
los tocayos, al pasarme Alba me dice que dando relevos podemos ir, le digo que
intentare dárselos pero cuando pueda. Esto inconscientemente hace que vaya un
pelo más rápido de mis posibilidades, pero serán segundos de reserva para el
final.
Llegamos a la calle Los Herran alcanzando a otro corredor,
una de mis favoritas.
Foto Jose Cruz |
El cuádriceps derecho se me empieza a cargar, pero hay
que llegar al 10 con alguna alegría. Llegamos al primer avituallamiento y me
dirijo a por las naranjas que no puedo dejar escapar como cada año jeje. A
partir de aquí veo como se alejan los dos compañeros de viaje que tenía hasta
ahora y me quedo solo al girar en la curva del alas, con viento y lluvia en
contra, pues buen sitio para quedarse solo, sí.
Foto Rakel |
La subida hacia la calle Francia en estas condiciones se hace
más cuesta arriba de lo que es y comienza el primer tramo del modo
supervivencia. El ritmo empieza a decaer, me van pasando corredores de vez en
cuando y a pesar de mis intentos por mantenerme con ellos me es imposible. A
pesar de ser una situación frustrante en todo momento soy realista y se cuál es
mi condición, por lo tanto, cabeza fría.
Foto Rakel |
A la llegada a El Prado el
abductor/psoas (o lo que coño sea) pasa de molestia a dolor, así que vamos
cogiendo compañeros innecesarios a cada paso. A pesar de eso hay que poner
buena cara al pasar de nuevo por la Avenida y gracias a los ánimos de los
conocidos se hace más llevadero el sufrimiento. Pasado este tramo llego a la
recta infinitita de Manuel Iradier donde cada vez me noto más lento. La cuesta
de San Cristóbal, se me asemeja a un muro como varios años atrás y al bajar
noto que ya son los dos cuádriceps los que están diciendo basta (modo
supervivencia 2.0) En la cabeza tengo el recorrido que me queda todavía, es
bueno, con ligera bajada, pero se me va a hacer todo lo contrario. Me noto que
empiezo a cojear y las zancadas son dolores, pero solo quedan 3Km y hay que
llegar a meta, que para eso nos hemos levantado hoy.
Foto Aita |
El paso por el prado de
nuevo espectacular da llegada a la recta infernal del estadio, donde los pies
se convierten en plomo y cuesta avanzar una barbaridad.
Llego al giro, la pendiente negativa del Paseo de Cervantes me
ayuda a coger fuerzas para encarar la última recta del día, antes de ella choco
la mano a tres chavalillos que hay en la curva con toda la ilusión del mundo y
diviso el arco de meta.
Foto Jose Cruz |
Aun con los dolores todavía puedo ver a algún conocido
que me anima y también veo la tan ansiada zona de llegada, así que llego con el
pitido del chip, dando por concluido el martirio en 1:19:21 en 61ª posición,
que bueno, dentro de que es mejorable, tampoco ha sido un desastre.
Mientras camino hacia el pabellón voy saludando a los
corredores que ya están por allí y me adentro en él entre risas con el fiera de
Urko donde me relata como le ha ido (parecido a mí, jajaja). Ya dentro me
encuentro con Rodriguez y Bravo (curioso que en los dos últimos años pude
correr a sus ritmos, cada año con uno de ellos, gente que pase lo que pase
siempre están a un gran nivel). Charlamos, hablamos de futuro y nos deseamos
suerte para la próxima. Este año veo que la cola del masaje es algo más larga
(como no) y decido ir piano piano hacia las duchas para no quedarme helado.
Y con toda esta aventura acaba la jornada dominical entre
charletas con los telerines que han estado al pie del cañón como siempre, con
las impresiones de Diana y las conversaciones delirantes de mis colegas.
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