jueves, 3 de mayo de 2012

XIII Duatlon Azkoitia 2012


Como dijo un novato de la música “The show must go on” y así ha sido. Después de una larga espera he vuelto a enfundarme el mono de competi, esta vez uno amarillo y no el negro de “independiente” del año pasado, tocaba la hora de debutar con el 42.195.
Lo que iba a ser un invierno de intento de mejora en los puntos débiles, han sido unos agonizantes meses en los que la lesión de cadera que tenía desde las últimas carreras del año pasado, me han hecho estar parado más tiempo del deseado, con entrenamientos alternativos para intentar recuperarme al 100%. Y aunque todavía sigue molestando un poco, el gusanillo de las competiciones estaba con su run run.
En Vitoria lleva casi dos semanas con un tiempo muy desapacible, entre viento y lluvia que no dejan hacer gran cosa y hoy no pintaba muy bien, tocaba salir hacia Azkoitia (el mismo duatlón en el que debute el año pasado), así que dejé hecha la mochila la noche anterior, para que por la mañana no me pillase el toro. Recoger a mi aita y salir fue todo uno, marcaban las 8:40 en el reloj y ahí empezaba todo.
Lo que más me preocupaba era el tiempo, porque aunque no me moleste correr con lluvia, la bici se me antojaba bastante peligrosa, como pude comprobar el año pasado, el cielo parecía contenerse, así que aunque con mal aspecto, de momento aguantaba. Aparco el coche, y voy a por el dorsal, todavía queda una hora, y va llegando la gente. De vuelta al coche y con mucha calma saco las cosas y me empiezo a organizar para meter las cosas al box, no hay casi nadie todavía, pero prefiero ir con tiempo ya que se puede.
A media hora del comienzo empiezo a calentar, muy suavecito, he intentado calentar bien las partes doloridas para no tener problemas en carrera. La intención es salir bastante enchufado y poder coger grupo de adelante (no los primeros claro, pero no quería reservar mucho) para así poder hacer una buena subida con ritmo en el sector de bici y luego en el último exprimir lo que quede. A final del calentamiento me encuentro con algunos del equipo, bien es cierto que de momento no conozco a casi nadie, así que me acerco a saludar y en breve hacia la salida.
Las chicas han salido 10 minutos antes y ya estamos nosotros preparados para el bocinazo. La salida es brutal, salimos como alma que lleva el diablo, adelante se forma un grupo en el que yo me veo que no puedo seguir, pero por lo menos no pierdo contacto visual, mucha caña para el principio alcanzo las 173ppm en muy poco tiempo, así que tranki que esto acaba de comenzar. Hacia el kilómetro 2 ya se empieza a estirar el grupo delantero y a partir de aquí seguimos corriendo en grupo a un ritmo bastante aceptable y después del subidón inicial parece que se calma un poco la patata. Mientras damos la segunda vuelta al circuito, intento visualizar en la mente lo que tengo que hacer en la transi, porque hace ya bastante que no practico; zapas, casco, bici….


Llegada a la T1 entre los 20 primeros, esta todo lleno de bicis, y me cuesta un poco encontrar la mía, cuando lo hago y me dispongo a salir noto que la bici de al lado está muy cerca y casi no puedo meterme para coger la mía, después de “chocarme “ con la rueda delantera de esta tres veces (menudo pardillo) consigo acceder y sacarla. Pasar la línea y montar es todo uno, no puedo perder el grupo que habíamos formado, en los baches del pueblo la bici hasta salta, no es hora de andar con cuidado, salimos del pueblo y nos espera un muro corto pero duro, las piernas se calientan, pero hay que tirar.


El grupo está formado por unos 6 corredores y están imponiendo un ritmo muy alto, yo intento dar los relevos, pero en algunos, gasto demasiado y decido entrar solo cuando este algo mejor.
Sobre el Km 6 se empieza a acoplar más gente, y los relevos empiezan a ser más efímeros, arreones de los rodadores intentado aumentar velocidad pero poco más, la idea es no perder el grupo por nada. Como siempre se oyen los gritos de “tirar” “entrar” y cosas similares, pero es el pan nuestro de cada día, no voy a entrar a polemizar con eso. Lo que si se oía era una bici que tenía al lado, que no se si eran los perfiles de las ruedas, pero parecía un obús.  A la llegada a Urretxu, ya somos  unos 25-30, es donde damos la vuelta hacia el punto de partida, esta vez la carretera esta seca y el descenso no va a ser tan peligroso, eso sí muy muy rápido, los de delante están algo lejos y escaparse del pelotón es imposible. El sector transcurre sin mucho más, algún botellín que se cae, pero sin incidencias.


A la llegada a la T2 decido colocarme de los primeros, ya que somos bastantes y la bajada de la bici es complicada, se ven un par de botas que se han soltado de los pedales y bastantes cruces a la hora de dejar la bici, que incluso yo, aun estando bien colocado sufro, así que no ha sido mala elección. La idea es intentar que no me pasen muchos del grupo en el que íbamos en la bici. Salgo algo tosco, con respiración entre-cortada, pero sin muchos dolores, hay un corredor que ha salido muy bien, pero lo poco que puedo hacer es mantener contacto visual, porque no puedo ir a su ritmo. Voy memorizando  lo que me falta de recorrido, no se hace muy largo, pero hay un par de repechos que me van a hacer sufrir, no me noto muy bien corriendo este último sector. En la última cuesta es el único adelantamiento que hago, queda una bajada pronunciada y en par de giros que me pondrán en meta. Mi poca o nula costumbre de mirar hacia atrás, hace que en los últimos 5 metros, literal, me adelanten 2 corredores, a lo mejor hay que echar un vistazo de vez en cuando, jeje.


Al final top ten, posición 10º de 129 con un tiempo de 1:34:23. Hay que decir que algunos triatletas de los que suelen estar arriba no han venido…..


Por cierto, decir que los kilómetros (8Km carrera pie - 36Km Bici – 4 Km carrera pie) han sido algo menos.
Por ultimo dejo un video que se han currado de dicho evento.