martes, 22 de mayo de 2018

X Triatlon Sprint Hondarribia 2018


En Mayo estaba en mente el ir a la carrera solidaria de Ziordia, pero me comentan la posibilidad de ir al triatlón de Hondarria y aunque me fastidie mucho no poder asistir el trideporte me tira y para lo poco que compito tengo que aprovechar. Hace ya unos años que no me acerco por allí y la zona es  muy chula para correr por sus alrededores, por lo que he visto dan una temperatura veraniega y eso le va a dar ese puntito extra.
Llegamos con bastante tiempo de antelación, me gusta el horario de tarde porque puedes ir con más tranquilidad en vez de pegar madrugones y apurar en los horarios. Con una suerte tremenda aparcamos en el parking del polideportivo, con lo que nos facilita mucho más la logística, jeje.
Cogemos los dorsales y después de  otear el ambiente vamos con la calma poniendo las pegatinas y dorsales en su correspondiente sitio antes de entrar a los boxes. Cola para el marcado y en nada ya estoy buscando mi lugar. Es el primero de este año y surgen las dudas de como colocar las cosas y más teniendo en cuenta que este año no tienes la obligación de ponerte el dorsal en bici, cosa que me hace pensar cuando me lo voy a poner, pero decido probar cosas nuevas y lo dejo colocado para el último sector.

Foto Aita
Hago un minitrote porque me da pereza ponerme todavía el neopreno, pero en nada ya me lo estoy enfundando para ir a probar el agua. De camino a la playa me encuentro con López, otra de las amistades que te da este deporte y charlamos un rato antes de desearnos buena suerte y citarnos para después de meta. Al meter el pie en el agua, lo normal, fresca fresca, pero tampoco creo que pasemos frio.
Después de unos largos y viendo desde lejos la salida de la chicas me acerco para la línea de salida. Veo un gran tumulto de gente en una parte (digamos que la buena) pero como paso de líos y agobios me voy al lado opuesto casi al final donde veo que hay menos gente, prefiero nadar a mi ritmo sin agobios en perjuicio de una mayor distancia. Un nervioso Javi también anda por los alrededores y charlamos un rato. 

Foto Festak
Poco a poco veo que la zona que parecía más tranquila también se empieza a llenar de gente, pero decido no moverme y espero allí hasta el bocinazo.
Salida como siempre, llego al agua y comienzo a saltar para avanzar y en cuanto llego a zona segura me pongo a nadar. A pesar del típico dolor de brazos y piernas que me entran no está la cosa tan mal, pero de la que levanto la cabeza diviso a la izquierda que estoy muy lejos de hacia dónde debo ir. Intento ir corrigiendo, pero los golpes empiezan a entrar en acción, agobio y  tragos de agua son la tónica hasta la primera boya, mala, muy mala elección. Primera boya que paso muy por el exterior porque quiero empezar a nadar más tranquilo, a partir de aquí la cosa se estabiliza, comienzo a bracear a gusto y veo que comienzo a avanzar. La llegada a la segunda boya se vuelve a convertir en un campo de batalla y al pasarla decido alejarme de nuevo de la marabunta. Encaro la playa y veo que cada vez la arena se ve más cerca, cosa que me alegra, porque no ha sido una natación nada bonita. Al ponerme de pies veo lo que ya deducía, una “mala” natación te deja donde te deja y es lo que hay. Bien es cierto que no soy nadador ni mucho menos, he tenido una mala elección y eso sumado a las microparadas te lastran.

Foto Rakel
Aun así no pasa nada, la larga transición hace que pueda coger aire y recupere algún puesto que nunca está de más. Llego a la bici, dejo el neopreno, casco en la cabeza y hacia fuera. Paso la línea, salto a la bici y ostia, siento un dolor en el pie izquierdo, la bici se para en seco, no sé cómo narices lo he hecho pero he metido el pie entre el cuadro y la rueda y claro no puedo sacar el pie porque se ha quedado pillado, así que lo único que quiero es caerme cuanto antes para poder reemprender la marcha. Caigo como las peras maduras, saco el pie como puedo, me levanto e intento reemprender la marcha lo más rápido posible. 

Foto Rakel
Chequeo los daños mentalmente, dolor fuerte en el empeine y la planta del pie cortada por los radios, pues sí que estamos bien, bueno la adrenalina hará su función y ya se verá, el día que no me pase ningún altercado voy a tirar cohetes, jajaja.
Si ya iba retrasado a esto le tenemos que sumar otro minutito por la tontería y más gente a remontar. La cronoescalada a Jaizkibel no va a ayudar mucho pero hemos venido a jugar. En cuanto se empieza a empinar la cosa me pasa Unai que va como un avión y me da ánimos. Con este tipo de circuito no tengo muchas posibilidades de recortar gran cosa, pero pongo mi ritmo de crucero e intento disfrutar de la subida. Me pasa alguno más, pero yo también estoy pillando a la gente de delante, cosa que me motiva. Llegamos hasta Guadalupe y me parece que está más cerca incluso que otros años, jeje. 

Foto Festak
Ya solo queda la mitad de la subida, Me pasa Joseba e intento engancharme un poco, por lo menos me obligo a apretar algo, que hay que salir de la zona de confort. Nos mantenemos un pequeño grupo y a falta de 2 Km pasa Iker del Dida, pues otro pequeño arreón y a ver si le consigo aguantar.
Llegada al giro de 180º y solo queda la trepidante bajada, me coloco delante del grupito porque no quiero sorpresas y bajo como a mí me gusta. Llegamos al descansillo y lo bien que me vino al subir choca con lo mal que viene ahora, jajaja. En cuanto pasamos por Guadalupe, me pasa un corredor, le doy metros y por lo menos me orienta. Poca cosa más antes de llegar completamente abajo, cuidado en las curvas y a llegar sano a la carrera. 

Foto Festak
Por cierto, como me gustas esos “deportistas” que antes de dar una curva miran para atrás para ver si hay algún juez, se pasan al otro carril y trazan. Ya que no miren por su propio riesgo pues bueno, ellos sabrán, pero teniendo en cuenta que había gente y vehículos en el otro carril, podrían tener algo de consideración en respetar su seguridad, que ellos no tienen la culpa de que sean unos kamikazes, pero claro, solo nos interesa que no nos sancionen no? En fin….
Pues eso que llegamos a la segunda transición en un grupo de unos 10, algunos adelantamientos sin sentido y unas curvas más adelante esta la línea de desmontaje. Llego a mi sitio, dejo la bici, la primera zapatilla me cuesta más de lo normal, la segunda perfect y el dorsal que no se me olvide, me duele el pie, pero a ver cómo se comporta. Mientras que me voy poniendo el dorsal en marcha, intento pisar fuerte para quitar el dolor. Salimos al carril-bici y gracias a que Plagaro esta unos metros delante me ayuda a coger inercia para despegar. Al llegar al primer Km le alcanzo y espero que se una a mí pero cada vez oigo más lejos su respiración e intento concentrarme en lo mío. 

Foto Rakel
Son 5km así que no hay tiempo para descansar y el ir rebasando a corredores y los ánimos de la gente me hacen venirme arriba, algo bueno tenía que hacer en Hondarribi por lo menos. A mitad de carrera bajo un poco el ritmo para recuperar un poco el aliento y de nuevo a la carga. Por desgracia se me van acabando los metros y cuando me quiero dar cuenta estoy entrando a la pista de atletismo para pasar la línea de meta por detrás de mis dos últimos objetivos a los que no puedo dar caza. Me sorprendo de haber recuperado hasta el 25º puesto después del hándicap inicial con un tiempo de 1:12:43 y como sé que lugar me toca, acabo la mar de contento (es lo que tiene acabar corriendo, jeje) en estas carreras cada vez mas “profesionalizadas”.