lunes, 28 de septiembre de 2015

XX Triatlon Ondarroa 2015 / Ondarroako XX Triatloia - IX Gerardo Saiz Memoriala



Corrí el ultimo duatlón de la temporada en Euskadi y este sábado para no ser menos, corrí el que cierra la temporada de tris, de cierres está el tema. Triatlón de Ondarroa, tendría que escribirlo en mayúsculas, pero de este modo hago honor a la humildad con la que organizan este precioso tri y que es sin lugar a dudas, de lo mejorcito que hay por estas tierras.
El día parece que va a acompañar, por lo que sin prisas cargamos en el coche los bártulos y recorremos los menos de 100 Km que nos separan de la costa Ondarrutara. Como siempre ambiente espectacular el que se respira, los voluntarios muy amablemente me indican el lugar idóneo para aparcar y comienza la aventura…
Por diversos motivos, este año no se ha podido competir todo lo que me hubiese gustado, así que intentaré aprovechar este último cartucho, de la mejor manera posible para acabar esta temporada con un buen sabor de boca. Vuelta al perímetro para ver donde estoy colocado y en nada ya me encuentro metiendo las cosas en el box. Sitio fácil para recordar, por lo que solo me dedico al posicionamiento de las cosas, con los años se va haciendo cada vez más rápido, tanto, que parece que te queda algo por hacer. Antes de dirigirme a la playa, para calentar, decido hacer el recorrido de salida de la T1, puesto que ha cambiado. 

Foto Aita
 Da la sensación de peligrosilla, sobre todo con las pulsaciones con las que se sale, pero habrá que tomárselo con calma.
Ahora sí, me enfundo en la goma y me voy paseando hasta la playa. Sin pensármelo 2 veces nada más llegar me tiro para hacer los largos de rigor y aclimatar el cuerpo. La mar está algo picada, pero se podrá nadar medianamente bien. De la que toco playa, veo como ya han salido las féminas, así que me voy colocando en el mejor sitio que veo. 

Foto Ama
 Me escoro a la derecha, segunda fila para no molestar a los nadadores. Nervios típicos de salida, ya solo quiero salir y meterme en mi burbuja. Apenas un minutillo después de quitar la cinta del suelo dan la salida, con la sorpresa de la primera ola nada más entrar, la salto de la mejor manera posible y a la que puedo comienzo a nadar. Golpes los justos, apenas me han rozado y la primera boya está lejana. Las piernas, como de costumbre me empiezan a pesar, pero como es algo típico en mí, solo me queda esperar a que se habitúen y pueda nadar en mejores condiciones, en estos momentos solo sigo a los que me preceden sin ver hacia donde me dirijo. La cosa se va solucionando antes de llegar al primer giro, donde me tengo que poner a nadar un pelín a braza para pasar sin muchos apuros la boya. A partir de aquí, cada vez me voy encontrando mejor, parece que hasta nado recto y todo, jeje. A la altura del faro incluso me doy el lujo de ir mas sueltecico y ya empiezo a pensar en cómo hacer la primera transición.
Pasamos el puente de Calatrava y a la par que veo las escaleras de acceso, vislumbro un pasamanos que me viene de perilla para comenzar la ascensión. 

Foto Nuria GD
 Primer sector más que digno y entre aplausos de la gente, me inserto entre las alfombras que llegan hasta mi vehículo. Cambio de atuendo bastante decente y salida en bici correctamente. Como había dicho antes, esta salida entre adoquinado, no me da muy buena espina y no sé cuándo es el momento idóneo para meter los pies en las zapas. Algún que otro sustillo después, consigo estar más o menos en condiciones de pedalear y salimos a la carretera asfaltada.
En este impas, me ha rebasado un corredor, cosa que aprovecho para beber un trágico de agua y coger aire para lo que nos espera. 

Foto Aita
 Primeros repechos y empezamos a relevarnos, llevamos buen ritmo y con la vista siempre delante de pequeños grupos, se hace necesaria la colaboración para reducir distancias. Sobre los 5 Km nos alcanza Julen con otros  3 o 4 corredores, vienen muy fuertes y los relevos no se hacen esperar. En la subida a Milloi empiezo a notar las piernas durillas, pero por lo menos hay que intentar aguantar hasta la cima, cosa que consigo sin no menos esfuerzo. La bajada vertiginosa, nos lleva a otro repecho en el que tengo que tirar la toalla, para no acabar reventado, así que viendo cómo se me van alejando lentamente, intento descansar y coger mi ritmo, para ir mas cómodo y llegar con fuerzas a la cima. La bajada de curvas peligrosas (eso si, bien señalizadas por los voluntarios) hace que en una de ellas me despiste y tome por recta una curva a derechas, mea culpa, clavada de frenos y a volver al sitio.
Después de pasar el adoquinado de Lekeitio vuelven de nuevo las cuestas, nos habíamos quedado otro y yo desde la anterior subida y no subíamos nada mal, pero de estas que me pasan dos esputniks y me quitan las pegatinas. Ahí decido que me la tengo que jugar de nuevo e intento pillar rueda como sea. Cuando llego a ellos, veo que es Beñat y la misión en los toboganes que quedan es intentar aguantar como sea, no podría dar un relevo aunque quisiera (cosa que luego le comenté) y de esta manera entre subiditas y descensos llegamos de nuevo a Ondarru con la misión cumplida y las piernas con interrogaciones. 

Foto Nuria GD
 Nada más entrar en los boxes, me sorprende las pocas bicis que hay, no suelo percatarme de esta cosa, pero la entrada me hace levantar la cabeza. Busco mi sitio, me calzo las zapas y a ver cómo se comporta el cuerpo desentrenado. Mis dos compañeros de bici salen escopeteados, yo decido encontrar mi zancada y luego ya se verá. Beñat es un gran corredor y por lo menos lo estoy teniendo en el punto de mira casi toda la primera vuelta, eso me hace crecerme y dar un poquito más.
Primera pasada por línea de meta, ánimos de la gente de Arabatri, de conocidos y de familiares, unidos a los demás, hacen que ese paso sea muy emotivo, por lo que me envalentono y aprieto en la segunda vuelta. Se ha unido más gente a la carrera y los adelantamientos hacen que me olvide las rozaduras de las zapatillas, es una buena manera de entretener la mente. Los chavalicos de los avituallamientos unos fieras, como se lo pasan para dar los vasos a los corredores, jajaja. 

Foto Olatz
 Tercera y última vuelta, las fuerzas comienzan a flaquear y las pequeñas cuestas y las curvas no son tan dinámicas como las de al principio. En esta vuelta me dedico a devolver los aplausos a la gente que me ha estado animando durante las otras 2, sobre todo a los grupetos de gente del pueblo y por ultimo a Asier e Ibone que cada paso por su zona, era ponérseme la piel de gallina. 

Foto Nuria GD
 Con todo esto llego a los últimos 500m, hace un tiempo que no tengo ningún objetivo claro delante y detrás no viene nadie, por lo que los últimos 50m voy trotando y aplaudiendo a la gente de meta. Llego encantadísimo con el rendimiento efectuado en 2h02’07’’ y en una inesperada 8ª posición. Avituallamiento con charletas entre conocidos y algunos que conozco nuevos y primeras impresiones a la family detrás de la valla.
 
http://www.triatloi.org/campus/pub/clasificacionPrueba.asp?idioma=eu&idPrueba=199

Felicitar a los organizadores, al pueblo y a los voluntarios de Ondarroa, porque esto es lo que hace a un triatlón grande, un global inigualable, que sigue manteniendo la esencia que otros empiezan a perder.