martes, 28 de septiembre de 2021

Agurain Herri Krosa 2021

 No se cuanto hacia que no me apuntaba a una carrera, pero ya iba siendo hora. Siempre en estas fechas era cita ineludible la carrera de Orduña, pero después de ver que no se iba a organizar me decido a ir a la carrera de Agurain que como siempre coincidía nunca había podido correrla. Aprovechando la ocasión vamos bastantes componentes de la familia a correr desde las mas pequeñas a los más mayores.

Llegamos con bastante tiempo y vamos a recoger los dorsales, la sensación es de volver a las carreras populares, pero populares de siempre (no hay ni chip) con carreras para todas las edades, desde los 5 años hasta que el cuerpo aguante y como siempre recalco no tratan de hacer negocio con la carrera de los pequeños con inscripciones gratuitas, eso sí que genera “afición” por el deporte y no como a otros que se les hincha la boca de promulgarlo y cobrar a los más pequeños, sinvergüenzas.

Pues lo dicho, a las 11 comienza la carrera de mi sobrina, un kilómetro de su agonía y a la que veo llegar a meta apretando como todos los demás (haciendo tercera de su edad). Siguen saliendo más categorías hasta llegar a los 5 años, me encanta ver la ilusión de los mas pequeños en estas carreras. Con todo ello parece que hay que prepararse para empezar a calentar, el tiempo acompaña y hay que informarse de cómo va a ser el recorrido. Una marea naranja se deja ver por cualquier esquina, que pesados estos del Dida :P

Los saludos pertinentes con la gente que hacia siglos que no veía por estos lugares son inevitables. Se acerca la hora y nos llaman para acercarnos a la línea de salida. Como echaba de menos las populares, donde te puedes colocar en cualquier sitio de salida sin recibir codazos ni malas caras y en las que hasta el pistoletazo estas charlando con el que tienes al lado.

Y así se da la salida entre palabra y palabra saliendo como se puede por la empinada subida inicial.

Foto Zaspi

 La idea es seleccionar algo de grupo y luego ya se verá, pero en la que me quiero dar cuenta por delante se frena el ritmo y me veo primero, vaya por dios. En la segunda de las vueltas cortas un corredor joven me sobrepasa, Enaitz me dice que si es de otra carrera, yo creo que solo hay una así que estará probando. Acabamos la segunda vuelta y vuelvo a estar el primero, nos dirigimos para comenzar la primera de las 3 vueltas por el exterior del pueblo. Parece que vamos un grupo pero tampoco me da por mirar mucho para atrás. Intento mantener un ritmo alto, aunque ya no se ni lo que es eso. 

Foto Zaspi

Sobre el tercer kilometro me pasa Ibai Alba (viejo conocido de los tris/dus) aun sabiendo que esta a otro nivel intento aguantar el primer embiste y me voy con él. Parece que nos vamos los dos, aunque solo sea por un breve espacio de tiempo, porque un poco más adelante tengo que decidir entre aminorar o no llegar ni a mitad de carrera.

Tengo referencia visual con la cabeza de carrera que por lo menos me hace mantener un ritmo aceptable. Primer paso por meta y los ánimos de la gente chocan con la rampa de inicio, madre de dios. Mitad de carrera y creo que lo voy a pasar mal, estoy en tierra de nadie sabiendo que no voy a poder pillar al de delante y oyendo como por detrás me van recortando. 

Foto Zaspi

Paso por lugares por donde tuve alguna intervención y eso me hace mantener la cabeza en otro lado porque van a ser psicológicas estas 2 últimas vueltas. La cabeza dice que apriete, pero las piernas no están para esos trotes. Tampoco quiero mirar hacia detrás para ver la diferencia porque a falta de tener un cambio de ritmo, solo me perjudicaría mentalmente, así que continuo para comenzar la última vuelta.

Últimos 3km que se van a hacer largos de narices me duele el costado derecho, respiro entrecortado y ya la idea es que por lo menos el 4º esté un poco alejado para poder mantener la posición de podio de toda la carrera. Las cuestas se hacen muros y las rectas son interminables, aunque gracias a los ánimos de la gente se hace un poco mas llevadero. Giro de derechas en la gasolinera y recta sin fin que se me empieza a atragantar, el esfuerzo del comienzo hace un buen tiempo que esta pasando meya y sufro como un perrete chico. Llego a la rotonda y subo hacia la plaza, me dicen que apriete y aquí es donde me giro para ver donde se encuentra mi perseguidor Enaitz, cerca, pero creo que libro.

Foto Zaspi

Paso la línea de meta en segunda posición en 32:38 y me apoyo en una valla, estoy realmente reventado y me cuesta coger aire, después de un rato me aparto un poco de allí y me tiro en el suelo a la sombra para seguir recuperando, ya estamos viejecitos para estos esfuerzos jeje.


Cuando ya soy persona, voy a recoger algo de agua y a hablar con los demás participantes mientras veo que llega Diana a meta (mierda ya me gana en txapelas jajaja). Me dirijo para ver al último integrante de la expedición y hasta que llega voy animando a los que van viniendo. Agradecer a la organización que hayan podido realizar esta carrera y que nunca se pierdan estas carreras en detrimento del “negocio del running”.