miércoles, 5 de septiembre de 2018

V Triatlon Olimpico Sestao 2018


Después de unas bonitas vacaciones llenas de aventuras y a pocos días de llegar a Vitoria toca poner rumbo a Sestao para correr otro año más este esplendido y duro triatlón. Da gusto ver como se lo curra la gente fuera del negocio que nos está engullendo y todavía se arriesga a hacer estas pruebas a un precio razonable y con una organización que muchas de estas “empresas” envidiarían. Espero que se mantenga y no caiga como ya le está pasando a muchas pruebas de este tipo como la de Ondarroa, todos mis respetos….seguimos. Hace un mes cuando me apunte sabía que las condiciones iban a ser paupérrimas, pero eso no iban a ser excusas para pasar una buena mañana. El sol hace su aparición en cuanto miro por la ventana y así continua hasta la llegada al pueblo en el que están realizando la previa de la carrera con el tri popular. Aparco ocupando uno de los últimos sitios en el parking habilitado para ello y descargo todo el instrumental. Primeros saludos y risas con Unai uno de los grandes del mundillo y me dirijo a recoger el dorsal. Coloco las cosas antes de meterme a boxes con mucha calma, el cuerpo todavía no está con ganas de fiesta, aun así como antes o después tengo que realizar la labor, me dirijo hacia la alfombra de entrada acompañado de Iñigo el Benetero y coloco la bici y todo lo demás.
Cuando quedan 15 minutos para la salida de las chicas me coloco el neopreno y me dirijo a la gran piscina para probar el agua y calentar como las últimas veces que tan buenos resultados me ha dado. Viendo la salida de las féminas desde el agua me voy acercando a la salida y me coloco en las primeras filas, esta salida es estrecha y hay que salir medio bien.

Foto Rakel
Bocinazo de salida, salto al agua de la forma más cutre que he hecho nunca, pero ante la gente que tenía delante no me he atrevido a tirarme de cabeza, así que llego al agua casi en bomba (me ha faltado taparme la nariz, jajaja) y en cuando toco el agua me pongo a bracear como loco. Ningún golpe que reseñar y sigo con mi peculiar sprint hasta verme más o menos en zona segura. A la llegada a la primera boya hago un amago de girar pero me doy cuenta de que hay que seguir recto hacia la siguiente, aun así es “más fácil” si tienes que seguir a la gente (es lo que tenemos los lentos). Llegada a la segunda boya y al girar y levantar la vista, sorpresa, no se ve una mierda a causa del sol, así que continuo con mi técnica de seguir burbujas. A mitad de trayecto consigo ver por primera vez esta tercera boya y me reubico para ir lo más derecho a ella. Primera vuelta finalizada y empiezan a doler los brazos, vaya eso no me lo esperaba, jajaja. Segunda vuelta casi idéntica a la primera intentando no gastar demasiado de mi barra de energía inicial. Al llegar a esta tercera boya por segunda vez, toca poner rumbo a la salida y a pesar de empezar a dar cada vez menos brazadas parece que no ha salido un mal sector.

Foto Fotos Deportivas de Aficionada Yolan de Sope
Salgo por la cuesta quitándome el neopreno y llego a mi bici sin ningún tipo de problema, esta vez sí que lo tenía fácil para recordar donde estaba. Larga recta antes de poder subir al vehiculo y lo primero que me encuentro es la cuestecita, así que con mucha calma voy llegando hasta arriba. Me aprieto bien las zapatillas y entre ponte bien y estate quito alguien me “aparta” ligeramente, sin querer me estaba yendo hacia la izquierda y Unai me corrige al pasarme. Sabiendo que es uno de los buenos en este sector intento agarrarme a él y con mucho esfuerzo lo consigo. Cada vez que tengo un poco de descanso intento darle algún relevo, son efímeros pero hay un grupillo no muy lejos y a ver si les podemos dar caza.

Foto Aita
Llega el primer repecho de San Gabriel, me mantengo con él pero con el corazón en la garganta y en el segundo arreón desisto de seguirle porque no quiero escupirlo, casi casi me paro en seco con dolor de piernas impresionante y veo cómo se va alejando. A partir de aquí me empieza cogiendo un corredor con el que hago parte de la primera vuelta y después nos alcanza ya un grupo más numeroso. El “plan” ya va a ser intentar mantenerme con ellos porque aquí ya empieza a hacer mella las vacaciones, jeje. Segunda vuelta sin muchos cambios viendo cómo se han ido formando los grupos adelante  y esperando que no nos cojan los de atrás.

Foto Rakel
La rotonda del pueblo hay que cogerla con cuidado porque suele haber bastantes caídas y solo queda dar una vuelta, así que en la salida de esta toca apretar un poco porque ya empiezo a hacer la goma en estos parones. Llegamos a la cuesta mortífera de nuevo, empiezan los ataques y yo me empiezo a quedar rezagado, así que decido coger mi ritmo para no petar del todo. Arriba me sacan unos metros, en la rotonda para volver a subir decido que no puedo perder el tren y a pesar de que me están doliendo las piernas intento hacer caso al grito de una voluntaria que dice “no los pierdas”. Por suerte de nuevo arriba contacto con ellos, no sé de dónde coger más aire para mis pulmones pero lo necesito, porque estoy muerto. La rápida bajada y los arreones que están dando me dejan otra vez casi fuera, pero consigo llevar a la T2 con ellos.
Bajada de la bici tranquila y comienzo a pensar en la carrera a pie, llego a la barra, cuelgo la bici y esta vez sí, esta vez me pongo los calcetines, es la primera vez que lo hago, pero no quiero seguir destrozándome los pies. Tardo un poco más, pero tampoco mucho y consigo salir de los primeros del grupo que hemos entrado. Este sector lo tengo más claro que nunca, conozco el recorrido y es para hacerlo con cabeza, voy con trote ligero, primero quiero ir encontrando sensaciones y sé que tampoco estoy para forzar mucho la máquina, así que me lo tomo con calma a la espera del primer acecho a la cuesta, esta vez, infernal, jajaja. 

Foto Ieltxu Mateo
La sensación es de lentitud total, pero como no tengo ninguna presión me lo tomo sin mucho agobio. El avituallamiento con los vasos y las botellas fresquitas son un puntazo y entre beber un poco y echármelo por encima llego a la vuelta para volver cuesta abajo. Recupero zancada y pulsaciones y llego al punto de inicio entre los ánimos de Jon el speaker que está retrasmitiendo impecable la carrera como es costumbre. He alcanzado a algún corredor, el primer sorprendido soy yo he incluso veo en los cambios de sentido que también reduzco diferencias con otros mientras que me mantengo con mis perseguidores, raro pero oye para mi mejor.

Foto Rakel
Segunda subidita, igual que la anterior, los ánimos de los de espectadores son una bendición y hace más llevadero el sufrimiento. Me cruzo con Joanes que va como loco a por la victoria y le animo mientras que yo me centro en llegar a la parte de arriba, porque sé que a partir de allí podre recorrer los últimos 3 Km con más brío. En la bajada me acerco a Gastañares y al pasarle le animo mientras continuo para rematar el triatlón. Ya en el paseo y después de dar el último giro de 180 veo cada vez más cerca a Asier, nos han sacado varios minutos en la bici y le tengo a tiro en el último Km así que manteniendo el ritmo puedo dar cuenta de él y a falta de 500m le rebaso animándole igualmente.

Foto Aita
Ya entre los ánimos de la gente me desvío hacia la derecha para encarar la línea de meta por la alfombra naranja. Paso en 8ª posición con 2:06:48 y a pesar de lo duro del circuito estoy bastante contento por como he gestionado todo, sobre todo una carrera a pie difícil donde he sabido contenerme e ir de menos a más. Ahora toca saludos, risas, “echarle la bronca” a Goitisolo porque solo me ha sacado 2 Km, jajaja y me voy rapidito a la ducha para poder aprovechar del buen día que hace.


Después de la entrega de trofeos improvisamos una  acampada al más puro estilo veraniego con los telerines y después de saciar el apetito retornamos a Vitoria que mañana toca empezar con eso del trabajo, jejeje.