miércoles, 19 de febrero de 2020

III Duatlon Sprint Erandio 2020

Antes de empezar con la chapa querría dar las gracias a los Bomberos de Vitoria por dejar unirme a su equipo y a Electro Alavesa por proporcionarnos la equipación que vamos a llevar este año, porque como siempre he dicho la publicidad no hay que pagarla, cosa que actualmente en el mundo del deporte “aficionadete” parece que se ha olvidado y la gente con tal de decir que es….o pertenecer a algo pierde la cabeza, en fin...
 Empieza la temporada de duatlones por el país vasco y viendo que el tiempo no es tan esquivo como hace unos años decido apuntarme al duatlón de Erandio, el cual nunca había disputado.  El sábado con la calma voy preparando las cosas, que con el retaco hay que hacer virguerías para que cuadren los minutos. Con tiempo llegamos a la zona cero del evento, primer vistazo antes de aparcar para ver donde está ubicado todo y a dejar la furgo en el lugar adecuado.
El buen tiempo nos acompaña pero también el viento y eso va a marcar un poco el sector ciclista sobre todo. En cuanto me dan el dorsal, después de un poco de cola, comienzo con la rutina de las pegatinas antes de entrar en boxes. 

Foto Aita
El sitio que me ha tocado es bastante bueno para recordarlo, así que después de colocar cada cosa en su lugar me dispongo a calentar. Estos momentos previos son buenos para reconocer parte del circuito, sobre todo si no sabes como es y en esas estoy cuando me encuentro con un cuestón por el que parece que vamos a tener que subir, es el único desnivel que va a haber, pero madre mía.
Entre unas cosas y otras y como parece que vamos a salir los chicos antes que las féminas, me voy acercando al arco de salida. Avanzo hasta colocarme en segunda fila aunque con nadie delante de mí. Miro hacia los lados y a poca gente de la buena puedo echar en falta, nos cantan 2 minutos, 1 minuto y allá vamos con el bocinazo. Salida como lo esperado, los galgos a tope, yo sé dónde está mi lugar y me dejo llevar por la inercia pero sin apretar para no reventar.

Foto Rakel
Primer paso por la cuesta, la gente se estira y las zancadas se vuelven corticas para poder llegar arriba. Subir bueno, se hace como se puede, pero la bajada es casi más peligrosa, las piernas apenas me dan y tengo que ir reteniendo para no caerme. Llegamos al primer km con el aliento entrecortado, me he quedado en un tercer grupo y toca empezar a coger sensaciones. En el Km 2 empiezo a correr algo más suelto, más a gusto y veo como algunos de los de delante se empiezan a descolgar, motivación extra para la segunda vuelta.

Foto Rakel
Con el ritmo estabilizado y teniendo objetivos a la vista comienza una nueva subida, ahora conociendo el circuito es más fácil poder controlar el esfuerzo en las zonas. Bajada loca de nuevo y recupero la zancada. Rebaso a Goitia y le digo que intente pegarse, el viento a pesar de no molestar mucho hace estragos en varias zonas. Me estoy quedando sin metros para poder alcanzar a lo que sería el segundo grupo y eso me va a hacer mella en el segundo sector pero viendo que no voy a llegar empiezo a pensar en la T1.
Los ánimos de la gente es la dopamina natural para llegar hacia la bici, transición buena y a ver como es la historia. Estoy en tierra de nadie y decido apretar para ver si pillo a los de delante. La idea es empujar con el viento a favor a por ellos, lo intento con todo lo que tengo pero llego al final de la recta habiéndoles comido pocos metros. 

Foto Festak.com
En el giro de 180º me despisto creyendo que hay que ir por la rotonda y me salgo por un lado de la valla, por suerte no sucede nada y rápidamente retorno al recorrido. Toca el plan B, esperar a que me pillen, seria de locos malgastar fuerzas peleando solo contra el viento.
La llegada de nuevos compañeros hace me inserte en el grupo, hay varios intentos para dar relevos, yo no soy de exigir nada, pero recomiendo que vayamos a relevos cortos,  más que nada para que no nos pille el grupo de detrás que viene como una bala. Habrá gente que quiere apretar otros que no y otros que no puedan, pero si eres de estos 2 últimos quédate detrás del grupo y no lo cortes. El último km antes del nuevo giro es una odisea con el viento sin dejarte avanzar. Empezamos de nuevo la zona buena, pero seguimos sin ponernos de acuerdo para ir organizados. Hay que hacer una especie de U entre calles (creo que es innecesaria y peligrosa, la pondría para la última vuelta para entrar en boxes pero no en todas) y continuamos a por el segundo round. Nos hemos quedado 4 corredores del grupo que había y es ahí cuando nos ponemos a relevos y vamos recortando la diferencia.

Foto Rakel
El ir alcanzando a varios rezagados de nuevo hace que nos vengamos arriba y aun con el viento en contra vemos que podemos darles caza. Comenzando la última vuelta damos caza a Plagaro y San Vicente, cosa que no está nada mal, pero también nos han cogido a nosotros y el último tramo se hace un poco peligroso por la multitud. En el último giro de 180º entre que me coloco mal y que me van cerrando el hueco, hay un ligero contacto, pero salvamos la situación sin ninguna incidencia y pido perdón por la parte que me toca. A partir de aquí intento ganar alguna posicione, no quiero callejear de los últimos antes del box.
Toca bajarse de la bici, estoy bien colocado y me bajo rápidamente, a pesar de eso hay algunos  contactos, pero por suerte sin consecuencias. 

Foto Yolansope
Cada corredor se va hacia una fila y eso disminuye el colapso, por lo que llego a la percha sin problemas. Una T2 de nuevo en mi línea (en estas distancias son clave) y salgo el tercero del grupo. En los primeros metros doy caza a uno y antes de la cuesta rebaso a Plagaro. Mi amigo el montículo nos la bienvenida de nuevo, me la tomo con calma porque las piernas ya no están muy allá. Antes de llegar arriba me adelanta San Vicente y en la bajada loca por gravedad le paso. Es una buena motivación estar con uno de los top para apretar y entre él y yo intentamos abrir hueco.
La respiración empieza a estar entrecortada, pero son pocos los km y hay que exprimirse. En un giro casi me voy por detrás de los conos sin querer, pero al darme cuenta retomo el camino y paso correctamente, no hay cosa que más me fastidie que los recortadores. Ahora está delante de mí, aprovecho para resguardarme del viento y cuando me recupero de nuevo tomo otra vez la delantera. Quedan menos de 500m por detrás no creo que me den caza, espero un sprint de Aitor pero las piernas no las tengo para muchas aventuras y no está la motivación de alcanzar un podio como el 2014 en Azkoitia, así que en cuanto hace el cambio de ritmo esperado ni intento seguirle. En los últimos metros echo un vistazo atrás, pero el puesto está asegurado, así que mantengo la velocidad hasta cruzar la línea de meta.

Foto Naikefotosport
Finalmente he acabado en 6º lugar con un tiempo de 55:16 cosa que me sorprende bastante, pero tampoco le vamos a hacer ascos, jeje. Veo la imagen desde mi posición con las manos y las rodillas y estamos todos parecidos, recuperando ese aliento que tanto nos hacía falta hace un rato. En cuanto me incorporo saludo a los compañeros y voy al avituallamiento,  no soy de comer mucho al acabar pero…más cañas con crema por favor para la siguiente jajaja.


Entre unas cosas y otras me dirijo a por la bolsa y como no tengo que hacer ruedas de prensa ni fotos a los medios ;) me voy en busca de la ducha al polideportivo. A la vuelta al centro neurálgico me reúno con la familia que me comenta que he podido quedar 1º de mi categoría (no le doy mucha importancia a esas cosas pero nunca está de más, porque uno ya va para arriba) y charlamos ya con los deberes hechos y además el pollito se ha portado de maravilla. Así que después de todo el evento recogemos los bártulos y hacia Vitoria.

Foto Festak.com

miércoles, 29 de enero de 2020

XL Idiazabalgo Herri Krosa 2020


La carrera de Idiazabal es una de las marcadas en el calendario, a pesar de haberla descubierto tarde, es una de las que sí se puede, hay que ir. Este año se celebra el 40 aniversario y han incrementado un poco la cuota habitual, espero que sea una medida excepcional porque no puede perder la esencia de todos estos años, pero aun subiendo un poco el precio (por añadir algún obsequio) sigue estando en la modalidad de carreras “baratas”.
Después de la organización vespertina salimos en hora hacia el pueblo, por suerte está cerca de Vitoria y no tardamos en llegar y aparcar con la ayuda de la buena organización de siempre. Este año llegamos un poco antes para que mi sobri pueda correr su carrera y después de recoger los dorsales llega el breakfast time para la mayoría de los acompañantes, que en esta ocasión y gracias a la visita de los madrileños, hemos ido en prole al evento deportivo.
Algo más de una hora antes empieza la fiesta con los más peques, de la primera “carrera” me quedo con una de las féminas que apenas levanta 2 palmos del suelo, no creo que llegue a los 5 años pero que da una lección de cómo hay que correr, para verla…
Olatz se va despojando de la ropa y empieza a calentar, en breve le toca el turno y de momento está el día algo frio. Es la última carrera antes de la mía, le digo cuatro tonterías antes de salir y allí va ella a la línea de salida. Son 1600m pero para alguien que no suele correr como si le dices misa. 

Foto Rakel
Le había dicho que serían unas 2 vueltas, la primera bien, según lo esperado, pero cuando da la segunda me doy cuenta de que serán 3 vueltas y eso puede que le descoloque, por suerte tenia fuerzas en la recamara y llega a meta como una txampiñona. Cuando vuelve a mi sitio sabéis lo que le pregunté? Que que tal se lo había pasado, que si había sido duro, pero en ningún momento le dije en que puesto has quedado, es más ni siquiera lo sé a estas alturas, señores/as dejen que los niños disfruten de lo que hagan, es más, nos reímos por el fallo de las vueltas y me preparo para mi carrera.
Meteorológicamente hablando es de los mejores años, fresquito y con poco viento, ideal para correr. A falta de 5 minutos me voy acercando a la línea de salida, voy buscando hueco y me coloco en segunda fila a la derecha detrás del poste hinchable y de Mimenza que dejara sitio en cuanto alargue la zancada. También me encuentro con Garikoitz un viejo conocido de los tris y como suelo decir, que nos sigamos viendo. No sé que pasa pero últimamente las salidas me pillan por sorpresa y esta no es menos, no soy el único y nos cuesta un poco reaccionar pero en breve y unos zarandeos después ya estoy corriendo más o menos cómodo.
Veo pasar a Gus como un avión por la derecha, le han hecho la 13/14 en la salida y tiene que apretar porque que se le escapan los de delante.

Foto Aita
La primera cuesta nos da un buen recibimiento y empieza a calentar los pistones nada más empezar. En la bajada vamos en tropel pero se empiezan a definir los grupos, el primero se aleja como estaba en los planes y este segundo en el que estoy yo, va más rápido de lo que me gustaría pero intento aguantar a ver qué pasa. Estos 3 primeros kilómetros han valido para estabilizar la respiración y comenzamos con la segunda cuesta. No sé ni los que vamos en grupo, estamos 3 intercambiando posiciones según la situación y de momento  me mantengo con algunos momentos haciendo la goma.

Foto Rakel

A esta  altura de carrera ya empezamos a adelantar a participantes doblados, con tanta gente a veces esta difícil el rebasarles, pero para ellos también es difícil colocarse para ser adelantados, por lo menos ponen bastante de su parte para ello.
El ritmo está siendo bastante rápido pero me animo pensando que ya hemos pasado el ecuador de la carrera. Campañilla de última vuelta y a subir de nuevo la cuestarraca. La respiración ya empieza a sufrir estos apretones y la piernas también, pero entre saludar primero a Enaitz que está de fotógrafo a su pesar y dar ánimos a los corredores que van en sillas de ruedas adaptadas y a la gente que va empujando de ellos (todos mis respetos para todos ellos) llego al comienzo de la bajada sin haberme enterado mucho.

Foto Aita
A partir de aquí comienzo a tener un bajón considerable de rendimiento, veo cómo pasan un puñado de corredores y solo puedo seguirles con la mirada a pesar de estar bajando. Paso el pequeño túnel e intento recuperar las sensaciones. Pasado el km 8 mi nivel de sacrifico también decae al ver que no voy a poder coger a nadie de los que me han adelantado. Por suerte en la rotonda de vuelta al pueblo noto que un corredor está cerca de mí, intento aumentar el ritmo y esta vez el cuerpo responde. El ultimo Km y medio va a ser un increschendo de velocidad aprovechando la ligera bajada que hay antes de hacer los últimos metros cuesta arriba.
Parece que no me consigo despegar del corredor, digo parece porque tampoco estoy mirando para atrás en esta posición de carrera. Llegados a la subida final sigo manteniéndome por delante de él, no estoy haciendo un sprint (como el de hace tres años con Beñat que nos jugábamos el cajón) simplemente voy subiendo el ritmo poco a poco para llegar a meta en condiciones. 

Foto Francisco
La verdad que llegar un puesto antes o después en estas circunstancias no me importa mucho pero después de ir tirando espero llegar antes. Veo que nos acercamos al arco de meta, casi debajo de él dejo de apretar y me dejo llevar pensando que estaba el control del chip debajo, pero sin esperarlo se planta en el último momento por delante de mí y queda en un puesto por delante de mío, así son las cosas…
Con tiempo de 34:36 y en 17ª posición llego exhausto a la meta y me doblo para recuperar el aliento, saludo a algunos corredores y me quedo hablando con Gus y Enaitz un ratillo de entre otras cosas el doping tecnológico, jajaja. 


Después y sabiendo cómo se ponen los vestuarios me dirijo a por la ropa para intentar darme un remojón pero a pesar de ello pillo el agua fría de rigor, pero bueno así entramos y salimos más rápido y con una piel más tersa, que a la edad de muchos de los que por aquí andamos ya nos hace falta. También es cierto que cuando te olvidas la toalla y las chanclas las cosas se hacen mucho más rápido e improvisando, jejeje.
Para finalizar y aprovechando el buen día que ha quedado vuelvo de nuevo donde está el meollo de la carrera para degustar el avituallamiento que antes no he podido comer y estar un rato en familia, aunque se echa de menos el momento ese de abrir el papel de meta y ver si tienes que ir a recoger algún obsequio.
Muchas gracias a los organizadores y al pueblo de Idiazabal por portarse tan bien con la gente que allí nos acercamos para hacer un poco de deporte.